Los cuidadosos al extremo

Existe una rara raza dentro de los geeks y son los cuidadosos al extremo.

Lo puedes detectar cuando abren sus laptops y éstas parecen haber sido recién sacadas de la caja, pero tienen más de un año de uso. Y ni hablar cuando las abren, todavía tienen el nylon que separa el teclado de la pantalla. Lo quitan con cuidado, y lo guardan dentro del maletín.

Los teléfonos o gadgets de los cuidadosos al extremo son una garantía de buen uso y gusto, están mejor que nuevos, diría mi tía. Como no estarlo si usan films para proteger la pantalla y una hermosa funda de silicona para proteger la carcasa. ¡Nunca le pidas a un cuidadoso extremo sus gadgets! Se ponen como locos, transpiran, titubean, quizás te lo presten pero van a mirarte muy atentamente mientra lo usas.

Funda

(Funda para Gadget, una característica fundamental de un cuidadoso)

Ser cuidadoso al extremo no es terreno exclusivo de usuarios de tecnología, en realidad es una condición que se encuentra en todo ámbito de la vida. Quizás los más complicados de soportar son los cuidadosos de sus autos, esos que cuando vas a la playa te hacen bañar y cambiar entero para que te subas a su auto (porque sino pueden quedarle un par de granos de arena en su impecable máquina).

¿Está mal ser cuidadoso al extremo? No lo sé, no es mi especialidad juzgar gente pero hay veces que sin ser psicólogo te das cuenta que si al cuidadoso se le raya un poquito su pertenencia más preciada se pone como loco y se pone a buscar el reemplazo. ¿Será esto una manía encubierta? Supongo que como todo extremo no es algo bueno. En mi caso y si bien me gusta cuidar de las cosas no me vuelvo loco por una rayita. Mi filosofía es usar, no guasquear (argentinismo, significa dar un uso descuidado a una cosa). Otro extremo es el de un amigo que se ata los cordones encima de su Thinkpad, hay para todo y para todos…

¿Como eres de cuidadoso con tus cosas? ¿Llegas a los extremos que describo? ¿Conoces otras características de este tipo de personas? Comenta 🙂

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